Estamos de enhorabuena. Este año queremos retomar nuestra actividad bloguera volviendo a sugeriros sencillas escapadas
Conscientes de que no siempre podemos cogernos dos, tres, cuatro semanas para perdernos entre paraísos terrenales, con esta sección nos gustaría animaros a salir de la rutina, de las pelis de serie B del sábado tarde y los domingos de maratón en el sofá.
Un fin de semana de primavera, una mañana de invierno, un puente de 3 días,… cualquier momento es bueno para escaparse de la rutina. Esperamos que disfrutéis de estos pequeños momentos, tanto como lo hemos hecho nosotros.
Reinauguramos esta sección con un sencillo plan de sábado por la Sierra de Madrid
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| la sierra de Madrid |
El sábado pasado y después de vencer la pereza que siempre se apodera de nosotros un viernes por la tarde al salir de trabajar y sentarse en el sofá al llegar a casa (…. Madrugar yo???? Ni de coña …), nos la jugamos a levantarnos a las 7:30 de la mañana para pasar una jornada en la sierra de Madrid con los amigos.
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| Subiendo por el canchal |
Sin grandes ambiciones, nuestro buscador oficial de rutas por la sierra: Porri (en ausencia del fundador de la guía Chimelín) nos propuso un paseíto por la cuerda de las Cabrillas (en Navacerrada) con final feliz en forma de parrillada en la Vaquería de Villalba.
Objetivo, soltar las piernas y tomarse un buen tentenpie de media mañana, con su chorizito, su quesito, y su pan de pueblo recién comprado ….. vamos si no para que vamos a madrugar … algún aliciente habrá que buscar.
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| ... las piedras del camino... |
Perfectamente pertrechados como si fueramos a subir un pico de 3.000 metros, prendas técnicas y bastones incluidos … los hay que hasta llevaban polainas por si había nieve o barro…. Comenzamos la subida entre árboles cantando el “Zorionak to you….” a Saioa (Feliz Cumpleaños otra vez ¡!!!). Tan deseosos estábamos de probar el chorizo (congelado …. a pesar de los esfuerzos de alguno que decidió calentarlo metiéndoselo bajo la ropa) que decidimos salirnos del camino para vivir aventuras extremas y de paso ahorrarnos algunas curvas del camino. La primera … cruzar un “peligrosísimo” río de aguas “caudalosas” y piedras traicioneras. Cuidado no os caigáis!!!!!, nos avisaba Patri, antes de resbalar y meter el pie en el agua (suerte de botas gore-tex). Noe se solidarizó a penas treinta segundos después y hacía lo propio para dejar constancia de que no tenemos el gen de cruzar ríos.
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| la cuerda ... ¿con nieve? |
A continuación subida a tumba abierta por un canchal … y como tenemos un GPS en la cabeza, al final, después de la matada de subir entre piedras nos volvimos a unir al camino. Buenos días, buenos días ¡! Nos miraba la gente que subía al vernos aparecer por el canchal (que digo yo pensarían…. Menudos domingueros).
Ya estábamos casi arriba y se acercaba la hora del aperitivo. Mientras Javi preparaba el tentempié con Mario y Noe de pinches (pon un Javi en tu vida … si llegamos a tener un fuego y un poco de arroz, nos prepara una paella ahí mismo), Saioa, Patri, Porri y yo (Juan) nos tiramos otra vez como cabras al monte para coronar el collado y ver las vistas de una desoladora Valdesquí sin nieve.
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| la bola del mundo |
Tocaron las 12:00 y empezaron a rugir los estómagos, así que nos apresuramos a bajar por la cuerda y llegar hasta el punto de encuentro del picnic de media mañana… cuando llegamos nos habían partido el queso, el salchichón… si hasta había tomate en rodajas ¡!!! (menuda calidad) … la pena el chorizo, que seguía más tieso que un bloque de hielo.
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| Foto de familia |
Tras el aperitivo descenso y corriendo a comer a la Vaquería donde nos esperaban Pili, Ana, Erika, Ito y Rubén … a devorar carnaza y tomar tarta de queso.
Un magnífico día con los amigos, para romper con la rutina … a ver cuando repetimos ¡!!!
DATOS PRÁCTICOS:
Ruta:
Comida:
